Cómo cultivar tu amor propio: 5 verdades reveladoras

Hoy te quiero compartir estas verdades que te ayudarán en el camino hacia tu sanación. Pero ¿cómo así que sanación?, pues bien, la salud no solamente viene de nuestros alimentos y de los buenos hábitos que nutren nuestro cuerpo físico, sino también de la manera como nos percibimos a nosotros mismos; esta nos permite sanar desde el interior, al reconocer nuestros talentos, virtudes y sello personal.


Cuando pasé por el proceso de sanación del cáncer, aprendí que cultivar el amor propio era tan importante como el mismo tratamiento. Así que quiero compartir contigo las 5 verdades reveladoras que descubrí en ese camino, y que te ayudarán a construir el amor propio que mereces.

La primera verdad es que eres único. Deja de buscar tus defectos y aprende a ver tus rasgos como una muestra de autenticidad y singularidad. Eso que te pertenece y es único, te hace realmente especial, así que aprende a lucir tus diferencias con orgullo;  si te enfocas en estas como algo positivo, podrás amarte con mayor plenitud.

La segunda verdad es que la opinión más importante sobre ti es la tuya. No permitas que los comentarios de los demás te afecten, y concéntrate en cómo te percibes a ti mismo, priorizando aquello que vaya en línea con tus expectativas y tus deseos. Trabaja en esa percepción y busca estar en paz contigo mismo.

La tercera verdad es que todos tenemos cicatrices. Estas marcan nuestra historia personal y nos permiten ser la persona que somos hoy. Aprende a aceptar tus cicatrices, tanto aquellas que puedes ver como aquellas que no y libérate de los complejos. Tus cicatrices no te definen, sino la manera en que las conviertes en el símbolo de tus logros y aprendizajes de vida.

La cuarta verdad es que eres más de lo que ves en el espejo. La apariencia física es solo una parte de ti, y aceptarte como eres es fundamental para trabajar en tu amor propio. Si bien es importante cuidar tu cuerpo físico, no te definas solo por tu imagen. Aprende a verte desde tu esencia, aceptarte tal y como eres y valorar la persona que eres hoy y aquella versión en la que te estás convirtiendo.

Quinta verdad: el amor propio es un proceso diario. No se trata de abandonar tus complejos de un día para otro, sino de trabajar en ti mismo día a día, aprender a reconocer tu valía, alimentarla, y así verás cómo el amor propio florece. Dedica tiempo a ti mismo, aprende todas las herramientas que necesitas, prioriza tu autocuidado, haz actividades que te hagan sentir bien y en paz.

Trabajar en nosotros mismos es la mejor inversión que podemos hacer, así que deja de aplazarte y trabaja en tu amor propio, ya que es fundamental para vivir plenamente. Si estás atravesando un momento de cambio en tu vida, recuerda que apostar por tu bienestar es la mejor decisión que puedes tomar. ¡Te acompaño en este proceso!